jueves, 15 de enero de 2015

LA AGROINDUSTRIA EN LA REPUBLICA DOMINICANA

Elaborado por:
Eladio Contreras Reyes
Director Ejecutivo

INTRODUCCION

A raíz de su definición, la agroindustria, que es la actividad económica que comprende la producción, industrialización y comercialización de productos agropecuarios, forestales y biológicos, se puede apreciar la importancia que desde el Estado se formulen e implementen políticas apropiadas para su fomento.

Al hablar de la agroindustria dominicana, necesariamente debe hacerse una breve referencia de las legislaciones y mecanismos de apoyo (políticas públicas), que en diferentes épocas ha formulado e implementado el Estado Dominicano.

En una segunda parte se presenta cual ha sido el desempeño económico de los sectores agropecuario, industrial y agroindustrial, en especial su aporte al PBI total. En esta misma parte también vemos los niveles de crecimiento que los mismos han observado en el periodo 2003 2013. También se evalúa el desempeño de las exportaciones agropecuarias, industriales y agroindustriales.

En una tercera parte se presenta una lista de productos de origen agropecuario producidos en la República Dominicana, que tienen el potencial de ser altamente demandados en un estado de mayor valor agregado o de procesamiento. Esta parte va en un anexo elaborado para esos fines.

Para una cuarta parte se ha aprovechado para hacer una caracterización de los aspectos más importantes que han limitado el desarrollo y consolidación del sector agroindustrial dominicano.

En una quinta y última parte, se formulan las conclusiones, reflexiones y recomendaciones en cuanto a las acciones que desde el Estado Dominicano y desde el sector privado se pudieran poner para el fortalecimiento sostenible del sector agroindustrial dominicano.

I.              LEGISLACION DE FOMENTO AGROINDUSTRIAL EN NUESTRO PAIS

El fomento de las actividades agropecuarias y el desarrollo de la zona rural siempre ha estado presente en las distintas Constituciones que ha tenido la República Dominicana en los últimos 48 años.


I.I         EL DESARROLLO AGRICOLA EN LA CONSTITUCION DOMINICANA

En las Constituciones del 1966, del 1994 y del 2002, en su  TITULO II, SECCIÓN I “…Se declara igualmente como un objetivo principal de la política social del Estado el estímulo y cooperación para integrar efectivamente a la vida nacional la población campesina, mediante la renovación de los métodos de la producción agrícola y la capacitación cultural y tecnológica del hombre campesino.”

En la Constitución del 2010, en la SECCIÓN II DE LOS DERECHOS ECONÓMICOS Y SOCIALES en el artículo No 51, en el numeral 3, textualmente dice: “…. Es un objetivo principal de la política social del Estado, promover la reforma agraria y la integración de forma efectiva de la población campesina al proceso de desarrollo nacional, mediante el estímulo y la cooperación para la renovación de sus métodos de producción agrícola y su capacitación tecnológica;”

A nivel de las legislaciones adjetivas, se pueden evaluar, entre otras, las siguientes:

I.II        LEY NUMERO 6186, DE FECHA 12 DE FEBRERO DE 1963 DE FOMENTO AGRÍCOLA DE LA REPÚBLICA DOMINICANA.


La ley establece el marco de condiciones adecuadas para la promoción de las actividades agropecuarias en el País. Dentro de las mismas se destacan las siguientes:

I.III       LEY 292, DEL 30 DE JUNIO DEL 1966, SOBRE SOCIEDADES FINANCIERAS DE EMPRESAS QUE PROMUEVEN EL DESARROLLO ECONÓMICO Y SUS MODIFICACIONES.
           
El principal objetivo de la ley era crear los estímulos fiscales y financieros a las entidades de intermediación financiera que canalizaran recursos especialmente a los sectores agropecuarios y manufactureros.

I.IV                  LEY 532 DE PROMOCION AGRICOLA Y GANADERA DEL 27 DE DICIEMBRE DEL 1969

En su artículo 1, se establece que la ley tenía por objeto el desarrollo del sector agrícola y ganadero, mediante estímulos para el logro de las siguientes actividades (algunas):

En el artículo 2 se establecía que el Estado promovería:

o   El abastecimiento de materias primas de naturaleza agrícola y ganadera en función de los requerimientos del sector industrial dominicano.

o   El establecimiento de industrias, almacenes, frigoríficos en el área rural para la conservación, beneficio y transformación de los productos agrícolas y ganaderos.


I.V       LEY NO. 409, SOBRE FOMENTO, INCENTIVO Y PROTECCIÓN AGROINDUSTRIAL, DE 15 DE ENERO DE 1982

Esta es quizás una de las leyes mejores formuladas para el fomento de las actividades agroindustriales en la República Dominicana. El objeto y su aplicación están definidos en el artículo 1, que establece: “ Se declara de interés nacional el fomento, incentivo y protección de empresas agroindustriales, especialmente aquellas de alto impacto social y redistributivo y que cumplan con un proceso industrial definido, como la incorporación de valor agregado sustancial y la transformación de materia prima agropecuaria de producción nacional en productos aptos para ser destinados a ulteriores procesos de transformación, o en productos finales distintos a la materia prima original.”

También se consigna que…” Que ni la industria ni la agricultura pueden avanzar sin el desarrollo simultáneo e interdependiente de ambos sectores, dado que el crecimiento de la producción agropecuaria es el factor determinante del ritmo a que puede proseguir la industrialización; y que a su vez un apoyo industrial insuficiente constituye una limitación importante al desarrollo de agricultura y de su productividad;”

I.VI      LEY No. 84-99 DEL 6 DE AGOSTO DEL 1999, SOBRE REACTIVACION Y FOMENTO DE LAS EXPORTACIONES

Es por ello que se estableció un mecanismo de devolución o de reintegro de los gravámenes pagados en las aduanas, sobre las materias primas, insumos, bienes intermedios, etiquetas, envases y material de empaque importados por el propio exportador o por terceros (indirectos), cuando los mismos hubieran sido incorporados a bienes de exportación, o en el caso de aquellos productos que sean retornados el exterior en el mismo estado en que ingresaron al territorio aduanero dominicano.

I.VII     LEY 28-01 DEL 1 DE FEBRERO DEL 2001, DE DESARROLLO FRONTERIZO.

Mediante esta ley se crea una Zona Especial de Desarrollo Fronterizo, que abarca las provincias de Pedernales, Independencia, Elías Piña, Dajabón, Montecristi, Santiago Rodríguez y Bahoruco.

El gran aporte o estimulo que reciben las empresas que se acojan a dicha Ley son los siguientes: Las empresas industriales, agroindustriales, agropecuarias, metalmecánica, de zonas francas, turísticas, metalúrgicas y energéticas, y de todo tipo de empresas permitidas por las leyes dominicanas establecidas y que se establezcan en el futuro.



I.VIII    LEY NO. 392-07 SOBRE COMPETITIVIDAD E INNOVACIÓN INDUSTRIAL, DEL 4 DE DICIEMBREDE 2007

Esta ley tiene por objeto crear un nuevo marco institucional y un cuerpo normativo que permita el desarrollo competitivo de la industria manufacturera, proponiendo a estos efectos políticas y programas de apoyo que estimulen la renovación y la innovación industrial con miras a lograr mayor diversificación del aparato productivo nacional, el encadenamiento industrial a través del fomento de distritos y parques industriales y la vinculación a los mercados internacionales. Para cumplir con sus objetivos, esta ley proporcionará instrumentos para apoyar la agilidad logística, el incremento en las exportaciones, la colaboración entre distintos regímenes especiales, estimular las aglomeraciones y las cadenas productivas e impulsar la innovación y modernización industrial.

Como se podrá apreciar, las actividades agropecuarias y agroindustriales dominicanas, han sido objeto de forma privilegiada de las atenciones del legislador.

Distintas disposiciones legislativas han establecido en diversos periodos, todo un conjunto de mecanismos tendentes a propiciar el desarrollo y fortalecimiento de las actividades agropecuarias e industriales, bajo el entendido de que debe materializarse un desarrollo complementario, donde el sector agropecuario juegue el rol de ser el principal abastecedor del sector industrial dominicano, de las materias primas de origen agropecuario.


LA AGROINDUSTRIA EN LA REPUBLICA DOMINICANA.-

En el país operan entre 600 y 700 agroindustrias, ofertando una diversidad de productos. El PBI agroindustrial del año 2013 fue de 29,730 millones de pesos, generando unos 108,300 empleos, atendiendo que el PBI agroindustrial representa el 27.7% del PBI industrial. Si a los empleos generados por la agroindustria se le suman los generados por el sector agropecuario, que a abril del 2014 sumaban unos 608,000, hay que establecer que entre estos sectores ocupan unas 678,000 personas.

Para ese año, la producción agroindustrial se sub clasificó en Productos de Molinería con unos 653 millones; Azúcar con unos 1,434 millones de pesos; Bebidas y Tabacos con con unos 8,860 millones de pesos. Otras Industrias Manufactureras aportaron unos 18,783 millones de pesos.

Los rubros más importantes del sector son leche pasteurizada, cerveza, arroz descascarado, azúcar, harinas y derivados, café, cacao, entre otros.

En República Dominicana existen unas 400 plantas de pequeñas y medianas empresas lácteas que utilizan el 54% de la leche que producen más de 65 mil pequeñas y medianas explotaciones ganaderas. Sin embargo, las exportaciones de productos lácteos se mantienen muy por debajo de los niveles requeridos para poder acceder a mercados de mayores exigencias en materia de inocuidad agroalimentaria

La información fue ofrecida por el Consejo Nacional para la Reglamentación y el Fomento de la Industria Lechera (Conaleche).


II.I        RESULTADOS ECONOMICOS DEL SECTOR AGROINDUSTRIAL
 DOMINICANO 2003-2013. COMPORTAMIENTO DEL PBI TOTAL, PBI AGROPECUARIO, INDUSTRIAL Y AGROINDUSTRIAL.

Ojo ver anexos
Tal como se puede apreciar en el Cuadro No 1de los anexos, en el periodo 2003-2013, el Producto Bruto Interno ha tenido un crecimiento bastante significativo. A valores constantes, el crecimiento anual promedio fue de un 5.9%. El PBI agropecuario tuvo un promedio anual de crecimiento de 4.2%. El PBI industrial tuvo una media anual de crecimiento de 3.6%. El PBI agroindustrial creció a una tasa anual promedio de 3.3%.

 A valores constantes, el PBI total se multiplicó por 1.8, al pasar de 237 mil millones de pesos en el 2003, a 417 mil millones de pesos en el 2013. El PBI agropecuario se multiplicó por 1.5, al pasar en el 2003 de 21,400 millones de pesos, a 31,800 millones de pesos en el 2013.

El PBI industrial, en dicho periodo, al pasar de 75,672.6 millones  de pesos en el 2003, a 107,449.3 millones de pesos en el 2013, se ha multiplicado por 1.4.

El PBI agroindustrial se ha multiplicado por 1.4 al pasar del 2003 de 21,500 millones de pesos, a 29,700 millones de pesos, en el 2013.

En cuanto a la proporción o los aportes al PBI total, de los distintos tipos de PBI, hay que agregar que durante el periodo bajo estudio, el PBI agropecuario tuvo un promedio de 7.9%. El PBI industrial observo un promedio de 28.2%. El PBI agroindustrial promedió un 8% durante el periodo.  (obviamente que el porcentaje del PBI industrial contiene el porcentaje del PBI agroindustrial)

Al analizar los distintos cuadros se puede apreciar que esos tres sectores, el agropecuario, el industrial y el agroindustrial, han ido perdiendo importancia en cuanto su aporte al PBI total.

Para el 2003, el PBI agropecuario representó el 9% del PBI total. Se mantuvo por encima del 8% hasta el año 2006, con un 8.3%. A partir del 2006 cae al 7.7%, llegando a un mínimo de 7.1% en el 2008. En los últimos 3 años ha aportado el 7.6% al PBI.

En el caso del PBI industrial, para el 2003 su aporte al PBI total fue de 32%. Se mantuvo sobre el 30% hasta el año 2006, con un aporte ese año de 30.1%. A partir del 2007 cae al 28.5%, llegando a 25.8%, en el 2009 y 2010. Para el 2011 tuvo un ligero repunte hasta 26.2%. Para el año 2012 llego a su mínimo de 25.6%, observando un ligero repunte a un 25.8%.

El comportamiento del sector agroindustrial va muy de la mano de los sectores antes analizados. Para el año 2003 tuvo un aporte sectorial de 9.1% al PBI total. Se mantuvo sobre el 9% hasta el 2005, cuando tuvo un 9%. A partir del 2006, que tuvo una participación de un 8.5%, ha venido reduciendo ligera pero sostenidamente su aporte al PBI total.

Veamos: año 2007, 8%; 2008, 7.8%; 2009, 2010 y 2011, 7.5%; 2012, 7.4%; y en el 2013, 7.1%.


II.II       LAS EXPORTACIONES AGROPECUARIAS, INDUSTRIALES Y
     AGROINDUSTRIALES 2003-2013

El mejor indicador que mide el nivel de beneficios que un país tiene de los intercambios comerciales internacionales, evidentemente que son las exportaciones. Esto es así cuando se ve al mundo como un gran mercado.

La posibilidad de exportación de una economía o sector, refleja los niveles de competitividad parcial o total, estructural o coyuntural, que es lo que hace posible que un determinado producto se pueda vender en los mercados internacionales en un momento determinado.

AÑO
EXPORTACIONES INDUSTRIALES
EXPORTACIONES AGROPECUARIAS
EXPORTACIONES AGROINDUSTRIALES
EXPORTACIONES TOTALES
PARTICIPACION (%)
AGRICOLAS
INDUSTRIALES
AGROINDUSTRIALES
2003
4,683.8
656.0
131.0
5,470.8
12.0%
85.6%
2%
2004
5,193.6
602.9
139.4
5,935.9
10.2%
87.5%
2%
2005
5,348.8
673.6
122.4
6,144.7
11.0%
87.0%
2%
2006
5,641.0
811.8
157.4
6,610.2
12.3%
85.3%
2%
2007
6,073.8
926.4
160.0
7,160.2
12.9%
84.8%
2%
2008
5,593.7
1,011.0
142.9
6,747.5
15.0%
82.9%
2%
2009
3,933.7
1,393.8
155.4
5,482.9
25.4%
71.7%
3%
2010
5,053.5
1,481.5
218.5
6,753.5
21.9%
74.8%
3%
2011
6,540.7
1,716.1
235.3
8,492.1
20.2%
77.0%
3%
2012
7,076.5
1,755.8
236.9
9,069.1
19.4%
78.0%
3%
2013
7,687.2
1,803.5
160.4
9,651.1
18.7%
79.7%
2%
Elaborado por la FUENEDEM  con datos de la Dirección General de
Aduanas (DGA).

Resulta indudable que las exportaciones agropecuarias dominicanas han tenido un comportamiento bastante dinámico en el periodo 2003 y 2013. No tanto así las exportaciones agroindustriales.

II.III      LAS EXPORTACIONES AGROPECUARIAS.-

Al inicio del periodo, en el año 2003, el aporte porcentual de las exportaciones agropecuarias con relación al total exportado era de 12%. Bajó al 10.2% en el 2004. A partir de esa reducción inicia un aumento sostenido que lo llevo a un 25.4% en el 2009.

A partir del 2010 inicia un descenso ligero, situándose en 21.9%; en el 2011 aportó el 20.2% de las exportaciones totales. En el 2012 llegó  a representar el 19.4% y en el 2013 aportó el 18.7% de las exportaciones totales.

En otras palabras, por cada 100 dólares exportado, la agropecuaria está aportando aproximadamente 19 dólares.

II.IV     LAS EXPORTACIONES AGROINDUSTRIALES.-

Las exportaciones agroindustriales, para el año 2003, aportaban el 2% de las exportaciones totales. Se mantuvo aportando un 2% hasta el año 2009, donde elevó su participación hasta el 3%, manteniendo este nivel de aporte hasta el año 2012. Para el año 2013 redujo su aporte al 2%.

En otras palabras, por cada 100 dólares exportado, la agroindustria está aportando aproximadamente 2 dólares.

III         PRODUCTOS AGROPECUARIOS CON POTENCIAL DE PROCESAMIENTO INDUSTRIAL

En sentido amplio de la palabra, prácticamente todo tipo de producto agropecuario es susceptible de poder ser procesado para la obtención de otro u otros productos. A continuación a presentar una lista de productos agropecuarios donde la República Dominicana presenta las condiciones naturales de poder producirlos de forma adecuada, y que pudieran ser utilizados como insumos de las empresas manufactureras radicadas en el territorio nacional.

El sector agropecuario dominicano está en la capacidad de ser un proveedor confiable al sector industrial de los siguientes productos:


 (FAVOR VER ANEXOS).

IV        FACTORES LIMITANTES DEL SECTOR AGROINDUSTRIAL     DOMINICANO

Atendiendo la dinámica con que operan el sector agropecuario, el industrial y el agroindustrial, se puede hacer una caracterización de algunos de los aspectos que más inciden en su desempeño.

·         Enfoque en el Limitado Mercado Nacional.- Un grave problema que todavía subyace en las relaciones empresariales dominicanas, lo es la visualización única del mercado nacional, que tuvo su origen en el modelo de sustitución de importaciones que se puso de moda en los años sesenta. Con este modelo se aislaba el mercado dominicano a través de altas tasas arancelarias que limitaba al consumidor nacional, que tenia casi siempre que optar por un producto nacional  El mercado dominicano es de apenas unos 10 millones de habitantes, lo que le confiere un bajo nivel de expansión o de crecimiento.

·         Situación de Control o Tenencia de la Tierra.- Históricamente ha habido problemas con el acceso a las tierras agrícolas adecuadas para la producción de los rubros agropecuarios que son usados como materias primas en las agroindustrias dominicanas.

·         Altos Costos Sistémicos.- Uno de los aspectos que más limitan todas las actividades empresariales en la RD, evidentemente que lo constituye el alto costo que tienen prácticamente todos los servicios necesarios para la generación de bienes y servicios. Es por ello que servicios como electricidad, transporte, impuestos y servicios de la burocracia oficial, financiamientos, entre otros, cuando se comparan con los que se pagan en otros países de la región, sencillamente sacan de competencia al agroindustrial dominicano.

·         Deficiencias en Gestión de Agronegocios.- Se ha determinado que una parte importante de las unidades productivas agropecuarias, al margen de la deficiente formaciones en los fundamentos agronómicos, también presentan serias limitaciones en los aspectos integrales de gestión de negocios agropecuarios.

·         Alto Costo y Restricción de Financiamiento.- Aunque se menciono anteriormente entre los aspectos sistémicos, por su importancia como elemento esencial para la creación de nuevas empresas y fortalecimiento empresarial, la falta de financiamiento en condiciones adecuadas, limita severamente el accionar de las agroindustrias nacionales. Financiamientos en todos los sentidos, tanto para apoyar el surgimiento de las agroindustrias, es decir, en plazos, montos y tasas adecuados, como también financiamientos para cubrir sus actividades corrientes (efectivo, cuentas por cobrar, inventarios, etc.)

·         Sistema de Incentivos a la Producción.- En la historia de los estímulos a los sectores productivos dominicanos, se ha determinado que los que más se han utilizado son los referidos a las exenciones impositivas, ya sea a nivel del ISR como de aranceles y del ITBIS. También se han implementado incentivos en la parte del acceso a financiamiento a tasas preferenciales y a plazos adecuados al proceso productivo. El problema ha radicado en la ausencia e inseguridad en la obtención de los incentivos, desde dos vertientes: Los casos de los incentivos impositivos, las últimas reformas tributarias que se han implementado en el país han desmontado una gran parte importante de esos esquemas de exenciones impositivas. En los casos de los incentivos por tasas subsidiadas, el problema ha radicado en la insostenibilidad financiera de dichos esquemas, lo que genera una cobertura de beneficiarios bastante limitada e incierta.

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

El desarrollo de agroindustrias competitivas es de vital importancia en la generación de oportunidades de ingresos y/o empleos. También hace un aporte considerable para la mejoría de  la calidad de los productos agrícolas y su demanda. Las agroindustrias pueden ser un elemento de vital importancia en la creación de empleo para la población rural, no sólo a nivel agrícola, sino también en actividades ligadas a la manufactura, envasado, procesamiento, transporte y comercialización de productos alimentarios y agrícolas.

Con las opciones de integración hacia adelante o hacia atrás, las actividades  agroindustriales tienen un gran potencial de ser elementos multiplicadores, tanto en la generación de ingresos y empleos, como en especial, la generación de valor.

Como se puede apreciar, el sector agroindustrial dominicano, que está vinculado se forma estrecha a los sectores agropecuario e industrial, ha podido irse desarrollando, aunque no a la velocidad y ni al potencial que indudablemente tiene, y tampoco está aprovechando las significativas oportunidades que ofrece el sector agroalimentario a escala global.

La demanda de alimentos y productos de origen agropecuario a nivel mundial, está observando variaciones sin precedentes. El aumento del nivel de bienestar y de los ingresos de una parte importante de la población mundial, así como la creciente urbanización y de la incorporación de las mujeres a los mercados laborales, ha generado un aumento de la demanda de materias primas de alto valor, de productos procesados y de alimentos preparados. Existe una clara tendencia hacia dietas que incluyen una mayor cantidad de alimentos de origen animal, como pescado, carne y productos lácteos, que aumenta a su vez la demanda de cereales para pienso (FAO, 2007). También se está dando un uso creciente de productos agrícolas, especialmente granos y cultivos oleaginosos, como materia prima para la producción de bioenergía. El comercio internacional y las tecnologías de la información y de la comunicación están acelerando los cambios en la demanda, lo que conlleva la convergencia de patrones dietéticos y un creciente interés en comidas étnicas de lugares geográficos específicos.

Al margen de otras medidas y disposiciones de carácter estratégicos, en la FUENEDEM  siempre hemos abogado por varios aspectos:

A)   Sistematizar las experiencias de esfuerzos y éxitos anteriores para el fomento y desarrollo de agroindustrias competitivas en un mundo cada vez más globalizado.
B)   Aprovechamiento de las oportunidades creadas por un mayor acceso a mercados internacionales, vía los distintos acuerdos de libre comercio y a las políticas de reducción y eliminación de las barreras al comercio que impulsa la OMC y otros organismos regionales.
C)   Establecimiento de de un sistema integrado de información e inteligencia de mercados internacionales.
D)   Sensibilizar a los formuladores de políticas públicas, para propiciar un cambio sustancial en la matriz energética dominicana, con la finalidad de utilizar en mayor medida energías producidas con las presas hidroeléctricas, gas natural y en la medida que sea posible, carbón mineral.
E)   Sensibilizar a los formuladores de políticas públicas, para propiciar la liberalización del servicio de transporte de carga, ya que hasta ahora el dueño de la carga no puede transportarla ni en sus propios vehículos. A nivel del transporte internacional, propiciar una mayor coordinación de las llegadas y salidas de las naves (marítimas y aéreas), para reducir al mínimo los retornos de las naves sin carga, que es, entre otras cosas, lo que encarece los fletes hacia la República Dominicana. Obviamente tratando de no afectar la llegada de cargas cuando los empresarios dominicanos la requieran.
F)   Sensibilizar a los formuladores de políticas públicas, para articular un sistema de financiamiento de mayor cobertura, mejores condiciones de plazos, costos más razonables y menos discrecionales, donde los productores agropecuarios, industriales y agroindustriales, tenga la seguridad de acceder a ellos siempre y cuando cumplan con las exigencias de los mismos.
G)   propiciar la liberalización del servicio de transporte de carga, ya que hasta ahora el dueño de la carga no puede transportarla ni en sus propios vehículos. A nivel del transporte internacional, propiciar una mayor coordinación de las llegadas y salidas de las naves (marítimas y aéreas), para reducir al mínimo los retornos de las naves sin carga, que es, entre otras cosas, lo que encarece los fletes hacia la República Dominicana. Obviamente tratando de no afectar la llegada de cargas cuando los empresarios dominicanos la requieran.
H)   Articular una mayor y más efectiva colaboración para el desarrollo de actividades conjuntas entre organizaciones multilaterales que trabajen en la agroindustrialización donde se definan claramente los roles y funciones particulares del sector público, las organizaciones multilaterales y el sector privado en el desarrollo agroindustrial.
I)     La creación de un entorno sistémico favorable al desarrollo de agronegocios, agroindustrias y cadenas de valor basadas en la agricultura.
J)    Formulación e implementación de estrategias para mejorar las políticas, los marcos reglamentarios, las instituciones y los servicios, todo ello con el objetivo estratégico de incorporar mayor valor agregado a los productos agroindustriales y aumentar sosteniblemente las exportaciones.
K)   Incorporación de estrategias de desarrollo agroindustrial en los programas nacionales y planes de acción estratégicos para ayudar a los agricultores pobres y de pequeña escala, como un mecanismo altamente eficiente para la lucha contra la pobreza.
L)    Financiamiento en condiciones competitivas.
M)  Asistencia técnica y capacitación enfocada en las buenas prácticas agropecuarias y a mercados, con la finalidad de garantizar la inocuidad agroalimentaria, vital para el acceso de los mercados internacionales. En esta parte seria altamente importante la obtención de certificadoras internacionales en materia de inocuidad agroalimentaria.
N)   Obras de infraestructura como caminos interparcelarios y centros de acopio apropiados, que faciliten y abaraten el transporte de las materias primas a los centros de manufactura.
O)   La implementación de esquemas asociativos y de integración, tanto vertical como horizontal, para aprovechar las sinergias y economías de escala, lo que se traduciría en mayores niveles de competitividad y rentabilidad. Dentro de los esquemas asociativos creemos firmemente en la creación de nuevas cooperativas y el fortalecimiento de las ya existentes.
P)   Priorizar la producción agropecuaria en unos 30 productos donde se tengan claras ventajas comparativas y que tengan el potencial de generar exportaciones anuales por 50 millones de dólares.
Q)   Apostar a la agropecuaria de mercados especializados y de alta exigencia como son los mercados de productos orgánicos y tropicales. Ya estamos teniendo muy buenas experiencias en banano y cacao orgánico. Hay que acentuar las buenas prácticas agrícolas para seguir accediendo y aumentar nuestra participación en ese nicho de mercado.

Hablar de la agropecuaria, de la industria, de la agroindustria, y en especial, de la ruta que nos lleve a una gran transformación de actitudes y prioridades sobre el desarrollo agropecuario y rural, nos puede llevar toda la vida, pero por hoy vamos a dejarlo ahí…!!!

Muchas Gracias…!!!


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